Esto ya no va de "bichos enajenados", sino más bien de individuos humanos de dudosa catadura que llevan a una situación de enajenación o alienamiento a un pobre animaluco que desempeña el rol de víctima propiciatoria.

No cabe duda de que los chimpancés son inteligentes y hábiles (y no solamente en el manejo de sus extremidades superiores). Bien, pongamos que queremos hacerlo ver a los espectadores de nuestro programa televisivo, para que tengan algo de que asombrarse, reírse o apiadarse. Pues nada, ponemos al chimpancé más listo de la clase a jugar a la jenga con un vejete (¿cuidador? ¿científico? ¿estudioso de la chimpancería en general? ¿deliniante? ¿vagabundo que hemos sacado del arroyo para susurrar cosejas al mono?) y con una mozuela (¿modelo? ¿presentadora? ¿amante de los makakos de Hokkaido? ¿dependienta de la charcutería de enfrente a los estudios de grabación?).

Conclusiones que podemos sacar después del visionado del video: 1) el mono es, de los tres presentes, el que demuestra más destreza en el juego; 2) se arrima con preferencia a la moza y evita en cuanto puede al pesao del viejo; 3) la conclusión 2 nos demuestra que o mono non é parvo; y 4) que si no fuese por las reiteradas consejas e instigaciones del vejete probablemente el chimpancé no habría perdido (esto ya es interpretación mia). Además mantengo que el viejo dio malas indicaciones aposta al pobre del mono para que perdiese como está mandado, evitando así que dejase patente que era más inteligente que él.

Ah, sí bueno, todo ello sucede en el mismo Japón. Raro ¿no? Humillación pública y televisión japonesa nunca han ido de la mano... ¿no?